lunes, 8 de diciembre de 2008

Madrid, una ciudad de contrastes


Comunidad cosmopolita y de vanguardia. Como corazón de la Península, sus latidos imprimen el ritmo de desarrollo de todo el país. Al igual que las grandes capitales Madrid es una ciudad viva, llena de contrastes y de oportunidades. Es un gran ejemplo de cómo es posible concentrar y preservar siglos de historia, de leyendas, de tradiciones, en apenas 8.000 km².

Su carácter contradictorio se deja entrever en su geografía. La Comunidad cuenta con dos zonas muy distintas: la Sierra y el Páramo. La primera, que se extiende por la Zona Norte y por una amplia franja del oeste de la provincia, atesora joyas naturales como La Laguna de Peñalara. Situada en el término municipal de Rascafría es un espacio protegido que alberga importantes muestras de la flora y la fauna autóctonas.

En esta misma zona encontramos el Monasterio de Santa María de El Paular, famoso por combinar su belleza arquitectónica con la del Valle del Lozoya donde en el siglo XIV fue construido. Sin embargo, de entre todos los atractivos que ofrece la sierra destaca el Monasterio de El Escorial. Considerado monumento patrimonio de la humanidad, fue el centro político del imperio de Felipe II.

El Páramo, atravesado por las vegas de los ríos Tajo y Tajuña, abarca las dos terceras partes del territorio. Entre los enclaves más visitados destaca Aranjuez. Ubicada en el límite septentrional de la Comunidad, es famosa por su Palacio y por sus bonitos jardines. El Palacio, que fue residencia real en época de los Reyes Católicos, recoge sobre todo muestras del siglo XVIII, entre las que destacan el Gabinete de Porcelana y el Salón de Espejos.

Sin embargo, de entre todos los territorios destaca la capital, centro neurálgico y de comunicaciones de España. Su riqueza histórica y su patrimonio artístico le valieron en 1992 el reconocimiento de “Capital Europea de la Cultura”. El Madrid Medieval, el Madrid de los Austrias y el de los Borbones, el Madrid romántico y el Contemporáneo, la capital se presenta como varias ciudades en una.

La Puerta de Alcalá, diseñada por Sabatini en tiempos de Carlos III, es uno de los símbolos más conocidos de la capital.

En pleno centro de Madrid se encuentra uno de los lugares más concurridos de la capital: la Puerta del Sol. En los últimos años se han convertido en uno de los más importantes ejes comerciales y de ocio: restaurantes, tiendas, teatros, bares han colonizado sus calles. Es además, un lugar emblemático debido a su famoso reloj, que año tras año marca la entrada de un nuevo año. Entre los monumentos que acoge la plaza destaca La Estatua del Oso y el Madroño y la estatua ecuestre de Carlos III.

La Plaza Mayor es uno de los lugares más vivos y representativos del Madrid castizo. Establecimientos comerciales que cuentan más de medio siglo, terrazas, tiendas de recuerdos, caricaturistas y la popular ferial dominical de sellos evocan el carácter de mercado abierto del que siempre ha hecho gala.

A finales del siglo XIX Madrid cumplía el sueño de contar con su propia Catedral. El proyecto inicial realizado por el Marqués de Cubas, tenía notables semejanzas con la Catedral de Reims, en Francia. Su largo periodo de construcción ha hecho que la Catedral de la Almudena presente varios estilos: neoclásico en el exterior, neogótico en el interior y neorrománico en la cripta. En el interior se encuentra la cripta con la imagen de la Virgen que da nombre a la catedral.

El Palacio Real, también conocido como Palacio de Oriente, es la residencia oficial de Juan Carlos I, rey de España. El recorrido del interior comienza por la impresionante escalera principal y de ahí lleva a una sucesión de salas, decoradas al gusto de los monarcas Carlos III y Carlos IV, con techos pintados por artistas como Juan Bautista Tiépolo.

El Museo del Prado, considerado uno de los mejores del mundo, ha contribuido a proyectar la imagen de Madrid como foco de cultura a escala mundial. Este museo conserva una importante colección de pintura española, destacando la obra de Goya y de Velázquez. La mayoría de sus fondos se encuentran en el edificio realizado por Juan de Villanueva en 1785. Fruto del incremento en el número de visitantes que ha ido experimentando paulatinamente, el museo se vio obligado a acometer una ampliación , llevada a cabo por Rafael Moneo.

3 comentarios:

Laura A. Ramírez dijo...

¡Hola Eva! Esta pasada semana hemos coincidido a la hora de hablar de nuestra ciudad, de Madrid y me ha gustado leer tu post y ver las coincidencias lo cual indica que estamos bien documentadas. Si te apetece darte una vuelta por nuestro blog, también es cultural..."Éxodo Cultural". A ver si os gusta. ¡Enhorabuena a todo el equipo por vuestro blog!

Eva Valdeolivas dijo...

Hola Laura. Muchas gracias por tu comentario. Acabo de echar un ojo a vuestro blog y me ha parecido realmente interesante. Desde las Seis Caras de Rubik recomendamos su lectura.

Unknown dijo...

Me ha gustado mucho el artículo. En especial me ha impresionado cómo se destaca no sólo el carácter cosmopolita de la ciudad, sino también los bonitos paisajes naturales que tiene la región de Madrid, menos nombrados e incluso en ocasiones caídos en el olvido.
Alfonso Blanco